«De cierto os digo, que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él» – Mc 10,15
Este 2022 comenzó lleno de sueños y metas. Es así que en uno de los retiros de principio de año, nació la idea de formar un grupo para los más chicos, para lograr enamorarlos de Dios y de nuestra querida madre, Maria de Lourdes. Veiamos la necesidad de que desde una edad temprana puedan conocer el enorme amor de Dios y que formar parte de la Iglesia es mucho más que asistir a misa los domingos, sino que también es recorrer un camino espiritual junto a Dios.
Algunos integrantes de Apóstoles (desde 13 hasta 23 años) tuvieron la maravillosa idea de crear Apostolitos, dirigido a chicos de entre 1er y 4to grado de nivel primario.
Con muchisimo entusiasmo, se realizó la primer reunión el pasado sábado 20 de agosto en nuestra sede de Apóstoles, donde nos acompañaron un montón de chicos llenos de alegría y entusiasmo por conocer a Dios.
Se inició la jornada con una serie de juegos para poder conocer a cada uno de los chicos. Durante toda la reunión, mediante cantos,bailes y juegos, los chicos aprendieron sobre la Sagrada Familia. Dándose cuenta que podemos aprender de una manera divertida y dinámica sobre la vida de Jesús y su amor hacia nosotros.
Se hizo un «viaje en el tiempo» para conocer a cada personaje de la Sagrada Familia. Nos encontramos primero con Jesús, quien nos contó sobre su amistad con todos nosotros y algunas anécdotas de su infancia. Además, conocimos a la Virgen María a la cual recibimos cantando, bailando y rezando el «Dios te salve maria». Ella también nos contó varias historias, focalizándose en la entrada de Jesús a su vida y la actitud de servicio para con su prima Santa Isabel, quién estaba esperando también a un hijo, Juan el Bautista.
Mientras conversábamos con ella amasamos pancitos, los cuales al final de la reunión fueron horneados y disfrutados por todos. Para continuar, visitamos a San José, que nos habló sobre los sueños que tuvo antes del nacimiento de Jesús, se explicó el significado del San José dormido y finalmente cada uno armó una cruz con palitos, simbolizando el amor de Jesús entregado en la cruz, un amor sin medidas ni tiempo, un amor hasta el extremo.
Damos gracias a Dios por haber hecho posible este primer encuentro y haber podido empezar con éste nuevo proyecto para Apóstoles, donde no solo los chicos aprendieron, sino que también los más grandes. Ellos nos contagiaron de su alegría y amor por Dios durante toda la jornada.
